Propuesta personal de videoarte para la canción con el mismo nombre de Rigoberta Bandini. Lo tomo como excusa para explorar dentro de mi estilo gráfico, bailando entre los conceptos de multipotencialidad e inmadurez. Tratar de conseguir una pieza que me defina, dentro en ese afán mío por no definirme. El resultado es una pieza bastante ecléctica, que habla sobre dejar pasar el tiempo y nutrirse de cualquier experiencia, para poder brillar e incluso hacer brillar al resto.